Los albaricoques son una excelente fuente de vitaminas y minerales esenciales para la salud. Son especialmente ricos en vitamina A, vitamina C, potasio y fibra dietética. También contienen cantidades significativas de vitamina E, vitamina K, calcio, hierro y antioxidantes, como los carotenoides y los polifenoles.
Consumir albaricoques regularmente puede proporcionar una serie de beneficios para la salud. Su alto contenido de vitamina A y betacaroteno es beneficioso para la salud de la piel y la vista, mientras que su contenido de vitamina C fortalece el sistema inmunológico y ayuda a combatir los radicales libres. La fibra dietética en los albaricoques es útil para la salud digestiva, promoviendo la regularidad intestinal y reduciendo el riesgo de enfermedades del corazón y diabetes tipo 2.
Antioxidantes: Los albaricoques contienen una variedad de antioxidantes, como la vitamina C, los carotenoides y los polifenoles, que ayudan a combatir el estrés oxidativo en el cuerpo. Estos antioxidantes ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres y pueden reducir el riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, cáncer y enfermedades neurodegenerativas.