La arcilla blanca superfina Cattier se utiliza para preparar mascarillas de belleza y cataplasmas por sus beneficios sobre la piel y el cuerpo. Por su pH neutro, es especialmente adecuada para el cuidado de las pieles secas y sensibles. Al no ser alergénica, es idónea para el cuidado de la delicada piel de los bebés, pudiéndose utilizar como talco. Es antiséptica y cicatrizante, por lo que también es apta para el cuidado de pieles irritadas.
REPARACIÓN DE LA PASTA DE ARCILLA: Verter la cantidad deseada de arcilla en un recipiente no metálico. Añadir un volumen de agua (si es posible, mineral) que cubra totalmente la arcilla. Dejar reposar alrededor de media hora, después remover con una espátula no metálica hasta obtener una pasta fina.
MASCARILLAS: Aplicar una capa gruesa sobre la cara y el cuello evitando el contorno de ojos y labios. Dejar actuar durante 15 minutos aproximadamente, sin permitir que la mascarilla seque completamente sobre la piel. Aclarar con agua tibia y secar la piel con una toalla de algodón. Para completar el tratamiento aplicar una crema hidratante Cattier adecuada.
CATAPLASMAS: Con una espátula no metálica, extender una capa de arcilla de 2 a 3 centímetros de espesor sobre un tejido natural. Aplicar la cataplasma directamente sobre la piel y fijarla con un vendaje suave. Si la piel está irritada, poner una gasa fina entre la piel y la arcilla. Cuando la cataplasma esté casi seca, retirarla y eliminar los restos de arcilla con agua tibia, después secar la piel con una toalla de algodón.
BAÑOS PARA SUAVIZAR LA PIEL: Verter de una a dos cucharadas de arcilla en un vaso grande de vidrio, añadir agua mineral y agitar con una cuchara no metálica. A continuación, agregar la mezcla al agua del baño.